Ya la tierra se engalana
en las flores los colores
nos alegran el coraźon el alma
en los enamorados los amores.
Ya todo por dentro se remueve
se acaba la indiferencia
que sentimos cuando hay nieve
de lo bello a lo feo
vemos la diferencia.
Ya la luz alumbra de otra forma
ya amanece más temprano
encontramos la casi horma
de un nuevo tiempo casi verano.
Ya también vamos notando
que somos como árboles de naturaleza
que por dentro bamos brotando
que nuestra pereza se despereza.
Ya se aleja aquél dolor
que nos traía a mal traer
ahora tenemos otro olor.
María Pieedrasanta Sánchez Romero
24 de marzo 2011
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